KENIA
14 de enero de 2025
Día 1: DE MADRID A NAIROBI
El primer día de nuestra aventura hacia Kenia comenzó temprano en Madrid, con el vuelo de Turkish Airlines que partió a las 11:50. Después de una escala de 2 horas y 45 minutos en Estambul, aterrizamos en Nairobi alrededor de las 3.25. Estábamos ansiosos por descubrir todo lo que este país tiene para ofrecer, y al llegar nos estaba esperando Dennis, nuestro guía para los próximos 8 días.
Dennis, un hombre masái con calidez y amabilidad que nos sorprendió desde el primer momento, nos recibió con una gran sonrisa. A pesar de ser masái, habla español perfectamente, lo cual fue una bendición para nosotros, ya que nos permitió comunicarnos de manera más fluida y conocer más afondo su cultura. Nos llevó directamente al Kije Place Hotel, donde descansaríamos unas horas para recuperarnos del largo vuelo. El cansancio acumulado no era nada comparado con la emoción que estaba por venir. Después de descansar un poco, Dennis vendría a recogernos para comenzar el Día 2, en el que exploraríamos Nairobi, una ciudad llena de contrastes y cultura vibrante.
Día 2: EXPLORANDO NAIROBI
Nuestro primer día completo en Nairobi comenzó con Dennis, quien nos recogió en el hotel y nos llevó dando un agradable paseo a un banco para cambiar dinero y, lo más práctico para nuestra estancia, nos ayudó a conseguir una tarjeta local para poder usar internet durante nuestros días en Kenia.
La siguiente parada fue el mercado local, donde paseamos por sus coloridas y vibrantes calles. Dennis nos guió mientras disfrutábamos de la energía del lugar, una mezcla de sonidos, olores y colores típicos de Nairobi. Después, nos dirigimos al Kenyatta Internacional Conference Centre, uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Subimos a la azotea, y desde allí, nos sorprendió una vista panorámica de 360 grados de la ciudad que nos dejó sin palabras. Era una manera espectacular de apreciar Nairobi desde lo alto.
Para comer, nos llevó a un restaurante local que Dennis nos recomendó, donde disfrutamos de la auténtica comida Keniana en un ambiente relajado. Ya por la tarde, la siguiente parada fue el Centro de Jirafas, una experiencia que nos encantó. Verlas tan cerca y poder alimentarlas fue increíble. Nos sorprendió lo bien que estaban cuidadas, con mucho espacio para moverse y vivir en libertad.
Tras un día lleno de actividades, fuimos cerca del hotel a cenar. Al caer la noche, subimos a la terraza de nuestro hotel, donde disfrutamos de unas refrescantes cervezas mientras contemplábamos las vistas de Nairobi iluminada.
Día 3: PARQUE NACIONAL AMBOSELI
Nuestro tercer día en Kenia comenzó temprano rumbo hacia el Parque Nacional de Amboseli.
Llegamos a media mañana y, tras instalarnos en el AA Lodge Amboseli, un acogedor hotel con cabañas perfectamente equipadas y una refrescante piscina, decidimos relajarnos un rato en el agua.
Después de una deliciosa comida, emprendimos nuestra primera salida de safari por el parque.
Amboseli es famoso por sus imponentes manadas de elefantes y las impresionantes vistas al Kilimanjaro, la montaña más alta de Africa. La experiencia fue indescriptible: una manada de elefantes pasó a pocos metros de nuestro jeep, un momento que permanecerá grabado en mi memoria para siempre. La majestuosidad de estos animales en su hábitat natural, rodeados por el paisaje africano, es algo que no se olvida.
Al caer la tarde, regresamos al hotel para una rica cena y un merecido descanso después de un primer día de safari absolutamente espectacular.
Día 4: LAGO NAIVASHA
El día comenzó temprano con un desayuno energizarte, ya que sabíamos que nos esperaba una jornada emocionante. Después de varias horas de viaje en Jeep, llegamos finalmente a Fish`s Eagle Naivasha, un hotel que se encuentra a orillas del lago Naivasha. Las vistas al lago fueron sencillamente impresionantes, aunque las instalaciones del hotel, aunque cómodas, mostraban algo de desgaste con el paso de los años. A pesar de eso el entorno natural lo compensaba todo.
Tras un pequeño descanso, disfrutamos de una deliciosa comida local, con sabores frescos y sabrosos que nos dejaron con ganas de más. Pero lo mejor del día llegó por la tarde. Fuimos a realizar un safari en bicicleta por Hell´s Gate, un lugar fascinante en el que pudimos interactuar de manera cercana y única con la fauna local. Sin duda una de las experiencias más especiales y diferentes que hemos vivido hasta ahora.
Para cerrar la tarde, dimos una caminata por Devil´s Bedroom, una formación geológica muy bonita. Regresamos al hotel al caer la noche, listos para disfrutar de una deliciosa cena antes de descansar para continuar la aventura al día siguiente. Un día lleno de momentos inolvidables.
Día 5: LAGO NAKURU
El día comenzó con un desayuno lleno de energía para que lo que nos esperaba. Iniciamos la jornada con un safari en barca por el lago Naivasha, donde tuvimos la suerte de contemplar una gran variedad de aves y, lo más impresionante, ¡los hipopótamos! Estuvieron tan cerca que casi podíamos tocarlos, que respecto. Además tuvimos la oportunidad de ver algunos herbívoros en Crescent Island, un lugar realmente mágico.
Después de esta emocionante actividad, emprendimos el viaje hacia el Lago Nakuru y llegamos al Hotel Buruha Zenoni Nakuru. Tras disfrutar de la comida, nos dirigimos al lago a realizar otro safari, esta vez en Jeep. Este lugar es sencillamente increíble, conocido por su biodiversidad, y tuvimos la suerte de ver tanto rinocerontes blancos como negros, dos especies imponentes que hacen de este lugar aún más especial.
Al final del día, regresamos al hotel, y tras cenar, disfrutamos de unas cervezas frías en el bar de la zotea. Estaba al aire libre, con música de fondo, ¡el plan perfecto para terminar este día tan lleno de emociones!
Día 6: MASÁI MARA.
Después de un buen desayuno, nos pusimos en marcha rumbo a la Reserva Nacional Masái Mara, un viaje de aproximadamente siete horas en jeep. Durante el recorrido, tuvimos la oportunidad de ver algunos de los cultivos más importantes de Kenia, lo que nos dio una idea de la vida rural en este hermoso país.
Al llegar al Hotel Enkorok Mara Camp, nos sorprendió la belleza y tranquilidad del lugar. El hotel consistía en tiendas de campaña muy bien equipadas, con instalaciones cuidadas y en un ambiente acogedor.
Dejamos todo nuestro equipaje en las tiendas y nos dirigimos a comer.
La tarde estuvo llena de emociones. Realizamos una visita al poblado Masái, donde nos mostraron sus casas, cómo hacen fuego, sus cultivos y nos contaron sobre su rica cultura. Sin duda, lo más especial para mí fue jugar con los niños del poblado; me hicieron sentir la mujer más feliz del mundo. Fue uno de los momentos más mágicos de todo el viaje, un día que recordaré siempre.
Antes de regresar al hotel, Dennis, nuestro guía, nos llevó a un bar local en el pueblo, donde nos tomamos una cerveza en un ambiente muy auténtico. Ya por la noche, regresamos al hotel y disfrutamos de una cena tranquila, reflexionando sobre las maravillas de este increíble día. Sin duda uno de los mejores hasta ahora.
Día 7: MASÁI MARA
Hoy fue el día completo de safari en la increíble Reserva Nacional Masái Mara. Nos levantamos temprano para disfrutar del amanecer mientras nos adentrábamos en el parque. Y como buen inicio de safari, lo primero que vimos fue un león y una leona apareándose, ¡fue alucinante presenciar ese momento tan íntimos de la naturaleza!
El día siguió siendo una aventura, ya que tuvimos comida tipo picnic cerca del río, junto en la frontera
de Tanzania. Estábamos rodeados de naturaleza en su máximo esplendor. A lo largo del día, seguimos observando una increíble variedad de animales, todos en su hábitat natural y tan cerca de nosotros. Verlos tan libremente en su entorno fue una experiencia fascinante.
Este fue un día muy especial y bonito, que nos permitió conectar con la naturaleza de una manera única. Al regresar al hotel, nos sentimos completamente felices y satisfechos por lo vivido.
Después de una rica cena, descansamos, sintiéndonos muy afortunados por haber sido testigos de tantas maravillas naturales. Sin duda, un día para recordar siempre.
Día 8: MASÁI MARA
Hoy fue un día completamente dedicado a la magia de la Reserva Natural de Masái Mara, uno de los lugares más emblemáticos de África. Tras un delicioso desayuno, nos adentramos en la vasta sabana, donde la naturaleza nos sorprendió a cada paso.
Tuvimos la suerte de observar algunos de los Cinco Grandes en su hábitat natural. Vimos una majestuosa manada de leonas con sus cachorros amamantado, un espectáculo de ternura indescriptible. Más tarde encontramos a varios leones descansando a la sombra, imponentes y tranquilos en su reino. También tuvimos la fortuna de cruzarnos con manadas de elefantes, imponentes y majestuosos, y guepardos cazando con gracia. Y por supuesto, las elegantes jirafas, que se movían con una tranquilidad asombrosa por el paisaje.
La jornada fue tan rica en vida salvaje que parecía un sueño hecho realidad. Al final de la tarde, regresamos al hotel, pero antes hicimos una pequeña parada en el pueblo cercano. Paseamos por sus calles y disfrutamos de la calidez de su gente: niños jugando, comercios que venden todo tipo de productos locales y el bullicio típico de un pueblo africano.
Fue un día lleno de emociones, animales asombrosos y un vistazo a la vida cotidiana de la comunidad local. ¡Una experiencia inolvidable que llevaré en mi corazón!.
Día 9: VUELO DE NAIROBI A DIANI BEACH
Hoy dejábamos la Reserva de Masái Mara con el corazón lleno de recuerdos increíbles.
Desayunamos temprano y pusimos rumbo a Nairobi para tomar un vuelo al mediodía hacia Diani Beach. La despedida del safari y de nuestro guía, Dennis, fue agridulce. Fueron unos días maravillosos, rodeados de la naturaleza más pura y compartiendo anécdotas y vivencias con él.
Aunque nos dio mucha pena decir adiós, sabíamos que el viaje aún tenía mucho que ofrecernos.
Al llegar al aeropuerto, nos despedimos de Dennis y nos dirigimos al avión que nos llevaría a unas paradisíacas playas africanas. Cuando aterrizamos en Diani Beach, nos esperaba una gran sorpresa. Tomamos un Uber hacia nuestro alojamiento, el Hotel Maruja Park, y para sorpresa nuestra, ¡era una villa increíble! Una villa privada con piscina solo para nosotros y, además, con cocinera incluida. No podíamos creerlo.
Después de dejar nuestras mochilas, nos dirigimos al supermercado con la cocinera que nos acompañaría esos días. Juntos, hicimos la compra para asegurarnos de que tuviera todo lo necesario para prepararnos comidas típicas africanas. ¡Los días que nos esperaban en Diani Beach pintaban fantásticos!
Días 10, 11 y 12: PLAYA DE DIANI BEACH
Los días 10, 11 y 12 fueron pura relajación y disfrute. Nos despertábamos temprano para dar tranquilos paseos por las extensas playas de Diani, con la brisa del mar y el sonido de las olas como banda sonora. Además, aprovechamos para hacer snorkel y explorar las maravillas del océano, rodeados de peces y corales.
Durante el resto del día, nos relajábamos en la piscina de nuestra villa, disfrutando del sol y la tranquilidad. Algunos momentos los pasábamos leyendo en las tumbonas, simplemente disfrutando de la paz que nos rodeaba. También dimos paseos por el pueblo, deteniéndonos en los puestos de souvenirs locales, donde compramos algunos recuerdos únicos.
Los desayunos y los almuerzos los hacíamos en nuestra villa, ya que nuestra cocinera era una auténtica experta y nos preparaba comidas deliciosas, siempre frescas y llenas de sabor. Sin embargo, por la noche, nos dábamos el gusto de cenar en los restaurantes locales, probando la comida típica de la región y disfrutando del ambiente vibrante de la zona. Por supuesto, no podía faltar unas cervecitas frías para refrescarnos.
Una de las excursiones fue nuestra visita a Ukunda. Aunque nos gustó el pueblo, no pudimos evitar sentir que no estábamos seguros. Pasamos la mañana explorando un mercado local, donde pudimos ver la vida cotidiana de la gente, pero decidimos regresar a Diani para sentirnos más tranquilos.
Fueron días geniales, en los que combinamos la relajación con pequeñas dosis de aventura.
¡Definitivamente una parte del viaje para recordar!
Día 13: TREN MOMBASA - NAIROBI
El día comenzó con más momentos de disfrute, ya que aprovechamos nuestro último día en Diani Beach para seguir paseando por las playas y relajarnos en la piscina de nuestra villa hasta el momento en que tuvimos que partir. A las 15:00, tomamos un Uber que nos llevó a Mombasa para coger el tren.
Viajamos en el SGR Mombasa-Nairobi Express, un tren que tiene una duración de 5 horas y que, durante el trayecto, atraviesas una reserva nacional. La experiencia fue muy grata, ya que tuvimos la suerte de ver elefantes y jirafas en su hábitat natural. Un consejo para quienes planeen hacer este viaje: si podéis , siéntense en el lado derecho del tren, ya que es el mejor lugar para disfrutar de las vistas de los animales y la naturaleza.
Al llegar a Nairobi, tomamos otro Uber que nos llevó directamente al aeropuerto. Allí, aprovechamos para cenar y pasar algunas horas antes de tomar nuestro vuelo de regreso a España.
Día 14: VUELO NAIROBI - MADRID
Hoy, nos despedimos de este increíble país que nos ha dejado huellas imborrables. Nuestro vuelo sale a las 3.50 am con escala en Estambul, y de ahí, rumbo a España. Han sido días llenos de magia, en los que hemos descubierto la cultura, la vida y la naturaleza de Kenia de manera única. Un viaje que nos ha marcado profundamente y, sin lugar a dudas, ¡volveremos!
Desde los safaris hasta los paisajes impresionantes, cada rincón de Kenia ha sido una lección de vida. Nos vamos con el corazón lleno, agradecidos por cada experiencia vivida y por haber tenido el privilegio de conocer este maravilloso país.
Si quieres más detalles sobre cómo organizamos el safari, recomendaciones de hoteles o cualquier otra consulta sobre nuestro viaje, no dudes en escribirme. ¡Estaré encantada de ayudarte en lo que pueda!
Gracias, Kenia. Nos vamos con el corazón lleno y con la promesa de regresar.
Autor: elplanetaenunamaleta
Volver